miércoles, agosto 22, 2012

VUELVO A CORRER

Vuelvo a correr. En un estado de forma lamentable, con el médico avisándome de que cuide el colesterol (que te digan eso por primera vez es una sacudida tremenda, te sientes malo, podrido, fofo y viejo), y con las taras físicas habituales, vuelvo a correr, como cada mes de agosto. No es la operación biquini, es la operación abrigo de ante. Quiero estar en forma para cuando tenga que lucir mis bufandas, mis chaquetas y mi abrigo de ante. Es al revés, lo sé, pero odio vestir de verano, los pantalones cortos, los bañadores, el sudor y la horterada. Siempre he preferido el rigor y la contención del invierno. Como decía, vuelvo a correr. Cada verano es lo mismo, es mi pretemporada, que cumplo religiosamente, corriendo casi a diario. Puedo durar una semana, o dos meses, según el año, hasta que me harto y vuelvo al sedentarismo de siempre. Mi problema no es de cuerpo, digamos que brazos y piernas están bien, mucho hueso y poco músculo, mi problema está localizado entre la cintura y el pecho, donde se alojan las bebidas gaseosas, alcohólicas y demás evil ways de las que, ya que dejé de fumar y nunca he tomado drogas, no quiero prescindir. Así, correré, y pensaré que quiero estar en forma para algún 10km de primavera / verano en Barcelona. Corro con la misma música de siempre, desde Motörhead y Saxon hasta Cinderella, Scorpions o el programa radiofónico de Bob Dylan, ideal para hacer los estiramientos finales y volver a casa tranquilo y feliz. Como cada verano, vuelvo a correr. Que dure.