viernes, junio 18, 2010

PEQUEÑO RESTAURANTE JAPONÉS: WAGOKORO

Es una fabulosa noticia. Wagokoro, restaurante japonés de la calle Regás de Barcelona, abre todo agosto. Esos mediodías insoportables, con el sol requemándote por dentro del casco de la moto, serán más bonitos si te pasas por Wagokoro y por 16 euros saboreas un menú de cocina kappo. El local es pequeño, pero distribuido con inteligencia, hay un bonito plan detrás de cada elemento, y eso me gusta y lo noto solo entrar; tampoco hay baratijas superficiales ni tonterías. El lugar lo lleva una pareja catalano-japonesa, ella atiende las mesas con discreción y sutil simpatía, y la carta está formada por distintos tipos de menú. Hace poco tuve la suerte de estar en el que, se dice, es ahora mismo el japonés de referencia en Europa, el Koy Shunka del gótico, y fue sensacional, una obra de teatro perfecta representada con todos los medios, creativos y económicos, lo de este Wagokoro en cambio es una pequeña estampita, un delicioso haiku gastronómico que no debe pasar desapercibido en tu agenda si quieres restaurantes japoneses de verdad. El arroz, qué puedo decir del arroz. Es fácil hacer arroz japo ¿no? pues yo he tenido que comerme arroces insoportables, duros, sangrantes, que mataban todo lo que tocaban. En Wagokoro el arroz es como esas nubes de película de Hayao Miyazaki, es bonito, flota, es gustoso, suficiente por si mismo, y es la base de todo. El pollo era sensacional, qué jugosidad, aunque lo acompañaba una impresentable hojarasca de ensalada de supermercado, lástima. El sashimi iba en un bol, y debajo arroz y más arroz. La sopa de miso, la mejor que he probado. Las cantidades justas, el postre un acento al final de todo lo demás, como en el mismísimo Koy Shunka, donde nos sirvieron un coulant digno de restaurante de menú. Pero me temo que en este tipo de sitios, el postre no es lo que importa. Volveremos, Wagokoro es un japonés a proteger.