sábado, marzo 07, 2009

MITO DEL MACHO-CONDUCTOR

La chulería y autosuficiencia de la que hace gala gran parte de la sociedad cuando se ponen en marcha medidas para reducir los accidentes de tráfico es apestosa. Con la medida de reducción de velocidad en las autovías y autopistas de los alrededores de Barcelona a 80 Km/h como bandera, los condutores, muchos, casi todos, protestan indignados ¿cómo van a ir ellos a 80 km/h por toda una señora autopista pudiendo forzar la máquina hasta 120, 140, 160...? ¿eso es libertad? ¿es por la contaminacion? ¡el gobierno catalán penaliza al buen conductor con medidas inútiles! De toda la vida, y más en España, donde en el fondo todos somos unos chuloputas, el coche ha sido una extensión de la virilidad, o la feminidad, del conductor, ¡que no nos toquen lo cojones... ni el coche! Dentro de nuestro vehículo nos permitimos insultar a los demás conductores, saltarnos normas básicas de convivencia cuando no respetamos los semáforos o no dejamos cruzar a un peatón en un paso cebra, dentro de nuestro vehículo nos sentimos dioses, superhombres, estamos protegidos y la tenemos más gorda que nadie. Por tanto es lógico que el macho-conductor se ofenda cuando le obligan a reducir la velocidad a 80 km/h cuando se acerque a Barcelona por autopista. Pero ayer noche murieron cuatro en un mismo accidente, hoy lo hará alguno más, mañana igual, muchos de ellos por exceso de velocidad. No sé si estas víctimas también se sentían superpollas en su coche, pero seguro que si pudieran volver atrás dirían "sí" a todas estas medidas que tan solo tratan de protegernos de nosotros mismos.